Skip to main content
Temas:

conservador

La enseñanza de la historia sigue planteando problemas. En Estados Unidos una serie de Estados republicanos – Texas, Idaho, Oklahoma o Tennessee, entre otros- han prohibido que la enseñanza de la historia culpabilice a los ciudadanos blancos, promueva el resentimiento, o preste demasiada atención a las páginas negras de la historia estadounidense. Hay críticas al Proyecto 1619, publicado en The New York Times, e ideado por Nikole Hannah-Jones, que recibió el Premio Pulitzer por el ensayo introductorio a este proyecto. que "tiene como objetivo replantear la historia del país colocando las consecuencias de la esclavitud y las contribuciones de los afroamericanos en el centro mismo de la narrativa nacional de los EEUU. El Proyecto 1619 fue criticado por historiadores y políticos conservadores. El historiador David Blight, profesor de Estudios afroamericanos de Yale, de raza blanca, advierte que todo país tiene un pasado que hace sentir incómodo a sus ciudadanos. “El movimiento conservador lleva medio siglo intentando de forma intermitente hacer retroceder la enseñanza de la parte más incómoda de nuestra historia porque creen que nuestra obligación es formar patriotas; pero nosotros no educamos a los jóvenes para ser solo patriotas, los educamos para que entiendan mejor la sociedad en la que viven y eso les puede hacer mejores patriotas”. Según Thimothy Snyder, “la guerra contra la historia es una guerra contra la democracia”: “La historia no es una terapia y el malestar forma parte del proceso de crecer”.

José Antonio Marina